Pastor de Shetland: Características, Cuidados y Carácter

Una de las razas más reconocidas a nivel mundial es el pastor de Shetland. Su pelaje liso y largo, y su aspecto tierno harán que te enamores desde el primer momento. Si quieres conocerlo mejor y saber cómo cuidarlo apropiadamente, echa un vistazo a este artículo, donde te explicamos todo lo que debes saber. ¿Qué lo hace tan especial?

Características físicas del pastor de Shetland

Para comenzar, conviene hablar de su origen. Proviene de las islas Shetland, situadas en el norte de Escocia,, y surgió por el cruce de varias razas, como el collie o el pastor escocés. De hecho, sus orejas inclinadas, sus patas cortas y la cola gruesa reflejan su origen.

Continuando con su aspecto, desarrolla una longitud máxima de 45 centímetros con frecuencia y su peso alcanza los 10 kilos. Está considerado de pequeño tamaño, aunque parece más grande porque en el pastor de Shetland el pelaje es largo. Este se caracteriza por tener una cierta longitud y tonos marrones, blancos y negros (sobre todo, los dos primeros).

Generalmente, se considera que es ideal para personas con poca experiencia en tener animales. La razón es que se adapta bien a cualquier tipo de entorno (menos a las casas o pisos demasiado pequeños). La afabilidad es una de sus señas de identidad, al igual que su amor por el contacto con los humanos.

Carácter del pastor de Shetland

Es un perro bastante afable y que adora recibir cariño de sus dueños. Sin embargo, suele desconfiar de los extraños e incluso puede mostrarse distante al principio. Por esta razón, requiere cierto adiestramiento para acostumbrarse a la presencia constante de personas ajenas a su núcleo familiar (por ejemplo, vecinos).

Cuando llegue a tu hogar, tendrás que enseñarle a no ladrar cada vez que oiga un ruido desconocido. Igualmente, resulta imprescindible que fomentes el contacto con personas desde que es cachorro.

Por último, procura que se mantenga calmado y no esté hiperactivo, dado que está acostumbrado al ejercicio físico intenso. Es enérgico, inteligente y cariñoso, pero no tanto con otros animales, hacia los que muestra autoridad y dominación. En cualquier caso, puedes quedarte tranquilo, pues no tiende a la agresividad.

Cuidados del pastor de Shetland

Pese a que está acostumbrado a un clima templado por su origen, no le cuesta adaptarse a las zonas frías. Aun así, el calor excesivo puede debilitarle debido a su largo pelaje, así que conviene que lo lleves a la peluquería dos veces al año. Por el contrario, durante el invierno, su pelo duro evitará que pase frío.

Ejercicio

Recuerda que tiene las patas cortas, por lo que necesitará correr para que los músculos se desarrollen bien. Un paseo diario es una buena idea, pero procura que corra para ejercitarse. Los juegos le gustan, especialmente aquellos que implican que busque objetos con su olfato.

Alimentación

Como su tamaño es pequeño, también lo es su estómago. Por tanto, evita sobrealimentarle y distribuye las comidas en tres veces al día. El pienso no es recomendable, ya que no es una opción saludable y no suele estar adaptado a sus bocas pequeñas. Dale comida natural y procura siempre que consuma proteínas y fibras para su musculatura.

La dieta BARF para perro es una propuesta excelente, porque están acostumbrados a los productos crudos desde que eran pastores. De este modo, fortalecerás su sistema inmunitario al normalizar el contacto con las bacterias presentes en la carne. Puesto que su metabolismo es rápido, no es frecuente que padezcan sobrepeso.

Salud y cuidados médicos

La displasia de cadera es la enfermedad que sufre más a menudo y tiene un fuerte componente hereditario. Sus patas cortas hacen que tenga bastantes problemas a la hora de caminar. Respecto a los ojos, es posible que padezca distrofia de retina cuando supere los ocho o diez años.

Socialización y entrenamiento

Está considerada una raza fácil de entrenar, puesto que aprende con rapidez. No suele distraerse, así que no te resultará complicado mantener su atención. No obstante, no conviene que se canse en exceso, por ello, te aconsejamos juegos sencillos para que no se aburra durante el adiestramiento del pastor de Shetland.

La socialización con otros perros puede ser complicada cuando son más grandes que él. Tiene un instinto protector que demuestra cuando está cerca de animales más pequeños. Respecto a los niños, se lleva bastante bien y, por su pequeño tamaño, no es común que cause daños sin querer al jugar con energía.

El pastor de Shetland, como has visto, está acostumbrado al contacto humano y puedes tenerlo en tu casa cuando hay niños. Si vas a adoptarlo, plantea antes una adecuada nutrición con comida natural. Te invitamos a descubrir la prueba con descuento de 14 días que ofrecemos en Dogfy Diet. ¿Sabes cuánto necesita comer? ¡Calcúlalo ahora gratis!

FAQS

¿Es fácil convivir con un pastor de Shetland?

Estamos ante un perro con el que te gustará convivir, puesto que está acostumbrado a reconocer al líder de su manada. Eso sí, recuerda que es imprescindible que haga ejercicio. Por consiguiente, es un buen compañero solo para quienes tienen la capacidad de dedicarle tiempo.

¿Cuál es el comportamiento más común en el pastor de Shetland?

Hay una cualidad intrínseca a esta raza, y es el gusto por mordisquear los tobillos de las personas. Proviene de su función de perros pastores, por lo que es muy difícil que logres que deje de hacerlo. En cualquier caso, sus dientes no están muy afilados, así que no son dolorosos.

¿Cómo cuidar el pelaje del pastor de Shetland?

La longitud de su pelo implica que debes cepillarlo entre dos y tres veces por semana para que no se enrede. El pastor de Shetland con su pelaje es muy reconocido y debe estar impecable.

¿Cuál es la mejor forma de adiestrar al pastor de Shetland?

Como tiene un carácter amable y tranquilo, el refuerzo positivo es la única opción válida. Si recibe un estímulo negativo, desconfiará de ti con facilidad. En consecuencia, el adiestramiento del pastor de Shetland debe estar basado en recompensas.